Un plato de pasta perfecto para un domingo o un día de fiesta, y es que los canelones requieren prepararlos sin prisas... así que más vale contar con tiempo para elaborarlos y después para disfrutarlos. :-)
Nos apetecía incorporar unos langostinos al relleno de los canelones y buscando un poquito por internet quedó claro que el rape sería un compañero perfecto, así que me he quedado con las ideas del blog Las cerezas blancas y en cuanto a cantidades las que proponían en Les receptes de l'avi Amat.
Salieron muy ricos... y por suerte sobraron unos cuantos que ya están congelados, esperando para acompañarnos en otro día de fiesta.
Ingredientes:
- 20 placas de canelones
- 300 g de rape
- 300 g de langostinos cocidos (congelados)
- 1 cebolla y media
- 1 ajo
- 4 cucharadas de tomate frito (o 2 cucharadas de concentrado de tomate)
- 1 vasito de vino blanco
- 2 cucharadas soperas de aceite de oliva virgen extra
- 60 g de harina
- 50 g de mantequilla
- 250 ml de leche
- agua
- 1 hoja de laurel
- sal, pimienta negra molida
- nuez moscada
- 40 g de queso parmesano rallado
Preparación:
1. En 1/4 litro de agua, cocemos el rape durante unos minutos con una hoja de laurel, media cebolla y un poquito de sal. No debe llegar a hervir. A continuación, lo escurriremos y desmenuzaremos, cuidando que no quede ninguna espina y lo trituraremos con la picadora.
2. Pelar los langostinos y cortarlos en trozos pequeñitos. (Como utilicé langostinos cocidos, no los puse a cocer con el rape, sino es conveniente hacerlo).
3. Hervir la pasta en una olla con agua, según las instrucciones del fabricante. Después extenderemos las placas sobre paños de cocina, para que escurran el agua.
4. Pelar y picar la cebolla, la pondremos en una sartén con un par de cucharadas de aceite de oliva. Una vez esté pochada, le añadiremos el ajo y después el rape, los langostinos, la sal y la pimienta. (Para que quede más fina podemos triturarla en la batidora antes de añadirle el pescado).
A continuación le agregaremos el vino blanco, y una vez lo haya absorbido, las cucharadas de tomate frito. Removemos bien y dejamos cocer un par de minutos más.
A continuación le agregaremos el vino blanco, y una vez lo haya absorbido, las cucharadas de tomate frito. Removemos bien y dejamos cocer un par de minutos más.
5. Prepararemos la bechamel derritiendo la mantequilla en una olla, añadiremos la harina sin dejar de remover para que se comience a tostar, después le agregaremos la leche (mejor si está tibia) y lo iremos batiendo hasta que quede sin grumos y vaya espesando. Antes de retirar del fuego, le echaremos un poquito de sal y nuez moscada molida.
6. Para que el relleno quede algo más cremoso, podemos añadir dos o tres cucharadas de la bechamel, remover bien y ya podremos dejarlo enfriar. (Será más fácil enrollar los canelones con la masa fría).
7. En el recipiente que utilicemos para el horno, echaremos un par de cucharadas de bechamel en el fondo, y sobre ella colocaremos los canelones, cubriremos con el resto de bechamel y espolvorearemos el queso rallado.
8. Hornear con calor arriba y abajo a 190º (según horno) durante 15 minutos y después gratinaremos durante 5 minutos... y ¡listos para servir!
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